miércoles, 16 de noviembre de 2011

Familia y fortalecimiento de la autoestima en los niños y las niñas.


La familia constituye el contexto primario del desarrollo de los individuos. Allí conforman las actitudes y valores esenciales con los que enfrentarán la vida y sus desafíos.
Un sistema familiar funcional ofrece a sus miembros un ambiente sano, donde sus necesidades encuentran respuesta.
 Fortalecimiento de la Autoestima en los Niños y las Niñas.
Cuando hablamos de autoestima, hablamos del grado en que nos valoramos, aceptamos y nos calificamos a nosotros/as mismos/as.
  
Actitudes y conductas de los/as adultos/as que lesionan la autoestima de los/as niños/as.
A menudo los padres y las madres no son consciente del efecto que pueden tener sus palabras o acciones en la manera en que sus hijos/as se valoran a sí mismos/as.
La legítima preocupación por protegerlos/as y lograr que aprendan formas de comportamiento adecuadas, y en muchos casos altas expectativas respecto a su rendimiento escolar, pueden provocar que la relación con los/as hijos/as se vuelva tensa y genere sentimientos de baja autoestima.
Las críticas frecuentes acerca de sus acciones o su apariencia, los regaños constantes, los “boches”, las comparaciones, y por supuesto el castigo físico, son algunas de estas actitudes que infravaloran y lastiman el autoestima del niño o la niña.



Como ayudar a construir una sana autoestima en los niños y niñas.
Garantizar la seguridad básica y el sentido de pertenencia.
Demostrar a los hijos e hijas que se le ama sin condiciones es probablemente la mejor plataforma para que puedan desarrollar una autoestima sana.
Los/as niños/as necesitan saber que se les aprecia y acepta como personas, independientemente de su conducta.
Respetar y valorar las características particulares de cada niño/a. Cada niño/a es un ser humano único, por tanto diferente a los demás.
Desarrollar la confianza en sus propias capacidades y habilidades.
Este recurso para elevar la autoestima de nuestros hijos e hijas se relaciona con el anterior. Se requiere darles a los/as niños/as una buena dosis de estimulación, cuando desarrollan una acción o emiten una opinión.
La estimulación puede consistir en comentarios de aprobación, que valoren sus capacidades y en otras ocasiones se refiere a ofrecer oportunidades para intentar realizar una actividad o resolver un problema.
Al final podemos decir que la formación de la autoestima es por tanto el producto de los sentimientos, valores, pensamientos y actitudes con que nos desarrollamos a lo largo de la vida.


1 comentario:

  1. Excelente informacion compartida...
    Esto es lo que nos hace falta: EDUCARNOS...
    Compartir nuestro conocimiento nos permite Crecer y es un aporte
    Super importante en la sociedad...

    Felicidades Siri...
    Bendiciones.

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